top of page

Aprendamos a comunicarnos

APRENDAMOS A COMUNICARNOS

 

Una mala comunicación puede generar un problema

Sabías que el 90% de tus problemas tienen su origen en una falla en el proceso comunicativo?, los mensajes no son claros, no se saben decir, no se sabe escuchar...

 

Los signos de la comunicación

La comunicación está llena de signos que pueden favorecer o perjudicar la transmisión de un mensaje: los gestos que usamos al hablar, la entonación, el tipo de vocabulario, el lugar y el momento en el que hablamos, las emociones que reflejamos, el medio escrito o hablado y hasta las mismas palabras que usamos.

La verdad es que con frecuencia no entendemos lo que realmente el otro nos quiere decir, por ejemplo, alguien dice que se siente cansado y algunos entienden que está triste; otros, que está agobiado; otros, que no quiere que lo molesten; otros, que quiere que lo animen. Incluso, cuando andamos contentos, interpretamos todo en un sentido positivo y por el contrario, si andamos molestos, interpretamos las cosas en un sentido negativo…

En fin, comunicarse no es una tarea fácil, por eso es también el origen de muchos de nuestros problemas. El día que aprendamos a comunicarnos de manera eficiente y clara nuestra vida dará un giro de 180 grados, por algo se trata de un arte que pocos llegan a conquistar.

7 Pasos para comunicarnos mejor

1.- El modo de decir las cosas: escoge la forma correcta

Decir que estás contento debe ir acompañado de una sonrisa, decir que estás enojado puede acompañarse de una cara fruncida, decir que estás cansado puede escucharse entre un bostezo… la manera de decir las cosas es tan importante como el mensaje mismo.

El silencio es imposible para los hombres, aún el que calla comunica muchas cosas, así que cuando vayas a decir algo, piensa bien en la manera que lo vas a decir, no vaya a ser que tus gestos contradigan tus palabras. Los mensajes multiplican su fuerza cuando van acompañados de los signos correctos; así que, para cada palabra elige las circunstancias correctas.

2.- “Nunca” y “siempre” sólo existen en palabras: relativiza las cosas

Se recomienda aprender a relativizar las cosas, nos hemos malacostumbrado a generalizar nuestros juicios: “siempre llegas tarde”, “nunca me entiendes”, “otra vez lo mismo”, “ya me la esperaba”… Al  referirnos de manera absoluta estamos aceptando que las cosas no pueden cambiar, “que siempre serán igual”, “que nunca van a cambiar”. y solo nos estamos dejando llevar por  la percepción del momento.

 En el siempre y nunca, se generaliza, son palabras ajenas a la realidad , en donde dejar espacio a la duda, puede ayudar. -aun y que mucha gente busca certezas. Ten mucho cuidado, este tipo de imprecisiones al hablar crean un ambiente hostil entre las personas, para nada ayudan a corregir las cosas, más aún pueden incluso reforzar aquello que no se desea. La palabra tiene mucho poder y puede llegar a hacer realidad las cosas, así que úsala correctamente.

3.- No todo son palabras: sé asertivo al comunicar

Una persona asertiva es aquella que sabe bien lo que va a decir, a quién se lo va a decir, cómo lo va a decir, en dónde lo va a decir y cuándo lo va a decir. La persona asertiva es aquella que se pone al mismo nivel que los demás, no se pone ni por debajo ni por encima, se comunica de manera directa y precisa, respetando y haciéndose respetar.  se lee difícil, verdad?, Pero cuando falta asertividad en las personas, la comunicación se " mancha" al igual que las relaciones, por eso, intenta ser asertivo al comunicar.

4.- Nadie está obligado a pensar como tú: habla para el otro

Que las cosas sean claras para nosotros no significa que también lo sean para los demás. Con frecuencia caemos en el error de pensar que los demás entienden las cosas igual que nosotros, pero la verdad es que hay muchas cosas que no decimos pero que se necesitan decir para que el otro logre entender realmente un mensaje.  no se trata de hablar para ti, se trata de decir todo aquello que el otro necesita escuchar para entender tu mensaje.

5.- La comunicación es de ida y vuelta: retroalimenta los mensajes

Uno de los errores más graves en la comunicación -y que también es una de las causas que perturban las relaciones- es querer o sólo hablar o sólo escuchar; la comunicación es un proceso, necesita ir y venir, enriquecerse en el intercambio dinámico del habla y la escucha, se trata de un intercambio creativo que fusiona las ideas y también a las personas.

Un buen consejo es usar la retroalimentación, una vez que digas algo, pídele a la persona que te confirme lo que entendió; de la misma manera, cuando alguien te diga algo, confirma lo que entendiste; te llevarás grandes sorpresas cuando veas que cada cabeza entiende las cosas de manera muy diferente. A final de cuentas, se trata de un ejercicio de empatía.

6.- Dos orejas y una boca: escucha el doble de lo que hablas

Dios en su inmensa sabiduría nos dotó de dos orejas y sólo una boca –valga la analogía– pero quizá haga falta escuchar el doble de lo que hablamos. Cuántas veces mientras alguien nos habla, estamos pensando ya en lo que le vamos a responder o interpretando a nuestro juicio cuando ni siquiera el otro ha terminado de hablar. Así como un cantante necesita primero escuchar para saber qué cantará en el tono correcto, también nosotros primero debemos escuchar de manera activa para que nuestras palabras estén en la misma sintonía.

7.- La comunicación es vida: Comunica para amar

Algunos llaman a la comunicación: la línea vital del amor; porque al comunicarnos estamos compartiendo nuestra vida misma. La comunicación es en sí misma un acto de amor, a través de ella uno se entrega a los demás y también los recibe. Podrá haber comunicación sin amor, pero nunca habrá amor sin comunicación. Piensa en los muchos casos de parejas que teniéndose un amor verdadero fracasan en su relación, la verdad es que con el amor no basta, hace falta una buena comunicación que permita que ese amor fluya en las relaciones; por eso, en la comunicación, se debe ser afectivo y efectivo.

bottom of page